Ruta: Aparcamiento del Rigüelo (1.450 m.)- Cruce con la GR11 (1.720 m.)- Abrevadero (1.850 m.)-
Paso del Aspe (2.425 m.)- Pico de Aspe (2.640 m.). Regreso por la misma ruta.
Accesos: Desde Jaca hay que tomar una carretera que con dirección Aísa, parte del final del Parque de la Constitución (en el centro de Jaca). Son 24 kilómetros de carretera estrecha y curveada que llevaremos con paciencia y precaución. Llegados a Aísa, atravesamos la localidad y continuamos por pista asfaltada en dirección Norte (hacia el fondo del valle). Seguiremos esta pista hasta que se enfrente a una cancela sin paso (unos 15 minutos). Aparcamos en la zona junto al asfalto.
Horarios: 00:00 h. Salida desde el aparcamiento.
00:12 h. Vadeamos el río Igüer.
00:35 h. Poste con el cruce de la Gr 11.
00:50 h. Abrevadero.
01:00 h. Paso del embudo.
02:20 h. Paso o Collado del Aspe (2.425 m.).
02:50 h. Cima del Pico de Aspe. Parada.
03:10 h. Inicio del descenso.
03:35 h. Collado del Aspe.
04:45 h. Abrevadero.
05:15 h. Llegada al aparcamiento.
Desniveles: Acumulados 1.250 metros en ascenso y los mismos en descenso.
Dificultad: Media. El primer tramo hasta el embudo está con buena senda. A partir de los 2.200 metros entramos en un terreno kárstico y de lapiaz con simas, grietas y terreno áspero en el que nos moveremos siguiendo hitos. También usaremos las manos en algún paso sencillo.
Fotografía del Aspe en primavera desde el Pico Mesola.
Ruta en amarillo. Ruta "clásica" al Aspe.
Partimos desde la cancela del aparcamiento del Rigüelo. Nuevos paneles informativos Y nueva señalización con tablillas amarillas.
El Aspe es una cima emblemática en la zona, como puede ser Bisaurín o Collarada, así que la ruta es bien conocida. Recorremos durante diez minutos la pista que nos lleva a la zona de Llanos de Saleras.
Zona ganadera por excelencia. La pista se amansa después de una fuerte rampa. El macizo del Aspe se presenta a nuestros ojos con amuralladas laderas.
En pleno agosto, el río Igüer baja con un mínimo caudal, muy diferente al del final de primavera donde tendremos que buscarnos la vida para franquearlo.
Los nuevos paneles nos invitan a abandonar la pista para tomar el sendero del Aspe.
Vista atrás. Sendero muy claro en este tramo, aunque con poco personal a estas horas de la mañana.
Me sorprenden unas marcas blanco y verdes. Creo que estamos señalizando tanto las rutas con códigos de colores raros que pueden llegar a confundir.
Un primer poste nos señala la posibilidad de acceder a las surgencias del Rigüelo o Chorrotal. Seguiremos en dirección Aspe.
Un segundo poste cuando llevamos algo más de media hora desde nuestro aparcamiento nos marca el cruce con el GR11. Lo cruzamos siguiendo en ascenso con la señalización de Pico Aspe.
Vista atrás. Ubicación del poste.
Siguiendo el sendero alcanzamos a los 50 minutos un abrevadero seco. El sendero nos lleva hacia la uve del centro de la foto. El Embudo.
Cuatro trancos sobre piedras nos colocan en la zona alta de la montaña. El sendero es todavía claro y remonta una ladera dura, pero franca.
Abajo queda el Valle de Aísa. El día no termina de levantar y temo la presencia de nubes en la divisoria.
Este tramo tras el embudo, va a terminar en un falso collado o paso que da acceso al terreno Kárstico que embellece y da valor a esta ruta (es mi opinión).
Hoy todavía no dan los rayos del sol sobre el terreno, pero encontrarse con una muralla blanca, caliza, escalonada e iluminada por el sol de la mañana, es lo más parecido a encontrarnos con el frente de un glaciar.
Avanzamos ahora sin sendero, siguiendo hitos que nos pueden llevar por aquí o por allá. Si nos movemos por primera vez en este mundo, dejemos llevarnos por los mismos a su albedrío.
Disfrutaremos del entorno moviéndonos con calma. Encontraremos simas, grietas, fisuras y mucha roca, pero la belleza del lugar es posible que nos retarde la marcha.
Seguimos los hitos camino del Paso del Aspe. Aspe que, a la derecha, con tono rojizo contrasta con el mar blanco del Karst.
La blanca caliza nos deposita en terreno rojizo cuando nos situamos en las proximidades del Collado del Aspe.
Al que se llega encontrándonos un mar de nubes en la zona francesa. ¡Cuantas veces nos ha ocurrido esto!.
Pero, de momento, las nubes no suben a la divisoria, aunque estas cosas suceden en minutos. Nuestra dirección es hacia la ladera cuarteada por numerosas grietas. Abundantes hitos nos llevarán por las zonas más cómodas.
Abajo va quedando el Collado del Aspe. Apenas nos quedan 150 metros de desnivel para alcanzar la cima.
Una horcada previa al tramo final, nos hará descender 4 metros teniendo que apoyar las manos. Después, una rampa de piedras y escalones, nos depositará en cinco minutos en la cima.
Foto de cima.
Este es un día de Agosto que ha roto la monotonía de calor y cielos despejados. El viento en la cima obliga al abrigo.
Hacia el Este, al fondo, Collarada. En primer plano El Sombrero y el Pico Lecherín.
Hacia el Oeste el Bisaurín.
El Midi d`Ossau elevándose sobre las nubes bajas.
Fotografío al colega con el que he coincidido en la cima.
El frío nos invita a no permanecer demasiado tiempo en la cumbre. Además las nubes parece que empiezan a remontar.
Y no es cosa de estar entre la niebla mientras transitamos por el agrietado lapiaz lleno de grietas y simas.
Ültima foto y para abajo.
Las nubes entran por el collado del Aspe. Se aprecia a la izquierda de la foto, en color blanco, el Lapiaz calizo.
Hago una pequeña variación sobre la ruta de ascenso. En lugar de seguir la cresta que se aprecia en la foto, ahora desciendo por el fondo siguiendo otra línea de hitos.
Mi compañero de cima me precede ya a distancia.
Nuevos montañeros que ascienden. Es posible que para cuando lleguen a la cima, ésta se encuentre bajo las nubes.
Terminado el lapiaz, se retoma el sendero de ascenso, bien visible y que nos llevará a la zona baja de la montaña.
Llegada a la zona del embudo.
Y el cruce del GR 11. Veinte minutos más y llegaremos al aparcamiento a las 12:30h..
Bonita mañanera con una agradable ruta de montaña.
Imponente el Midi, como siempre tan "fotogénico". Gracias por la reseña,Jose Antonio.
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