martes, 26 de febrero de 2019

De raquetas por La Partacua. Valle de Tena.

Fecha: 20 de Febrero de 2.019

Ruta: No teníamos una ruta concretada, iríamos por la conocida pista hacia el Ibón de Piedrafita y sin llegar a él buscar las laderas de nieve que están bajo las paredes de la Sierra de la Partacua. El terreno es tan noble que permite transitar sin problemas por cualquiera de las laderas y montículos del entorno. La concreción de nuestro devenir de ese día se apreciará mejor en los mapas que siguen.

Accesos: Desde Biescas tomar dirección a Formigal. Alcanzamos el embalse de Búbal y en su contorneo nos aparecerá un desvío hacia Piedrafita de Jaca. Unas lazadas de carretera nos llevan al pueblo. La carretera continúa dos kilómetros más hasta las instalaciones del Parque Faunístico de La Cuniacha donde aparcaremos.

Horarios:  Sin ruta fija y con posibilidades de acortar el recorrido e incluso de variarlo a nuestro gusto, la de nuestra jornada supuso un total de 4h.30 m., de los cuales 40 minutos fueron de parada para el "tradicional" almuerzo montañero.

Desniveles:  el GPS nos dio un desnivel acumulado de 480 metros en ascenso y los mismos en descenso para un total de 10 kilómetros.

Dificultad: Fácil recorrido apto para todo público y principiantes.


Foto de ese día al iniciar el retorno.

Mapa-foto de relieve.  Salimos del aparcamiento de La Cuniacha, se sigue la pista marcada por las flechas. El círculo negro encima del Ibón es el punto donde se toma la ruta normal de acceso al ibón. Nosotros quisimos alargar un poco la jornada hasta la cota 1.804 m. Desde allí, retorno hasta el Ibón de Piedrafita y pasando después por una zona llamada Plana Terrosa retornaremos a la pista pasando junto a la alambrada del Parque La Cuniacha.

Mapa de relieve que complementa el anterior.

Nutrido grupo para una actividad sencilla y un día casi caluroso a pesar de ser Febrero.

Salimos desde el aparcamiento para tomar la Pista al Ibón de Piedrafita.

Tras una valla de cierre, la pista se presenta llena de nieve.

Entre los árboles podremos apreciar con zoom algunas cimas del Valle de Tena.

Nuevos paneles de señalización marcan perfectamente la ruta hacia el Ibón y el Arco.

Cuando se sale del bosque  (15 minutos desde la partida) aparecerán a nuestra izquierda los enormes paredones de Telera y Sierra Partácua.

Durante un trecho podremos seguir cómodamente por la pista con sus amplias curvas o aprovechar algunos atajos señalizados. Todo va por gustos.

Foto en un tramo de la pista con algunos árboles y fondo de las Paredes de Peña Telera.

La mayoría hemos elegido las raquetas que todavía llevamos en la mochila. Tres de nuestros colegas han optado por esquís.

La huella de la pista se mantiene todavía, a estas horas, dura así que nos movemos cómodamente sin ponernos las raquetas.

Transcurridos 50 minutos alcanzamos el punto donde se suele abandonar la pista para entrar en un bonito barranco que da acceso al Ibón de Piedrafita. El nuevo poste señalizador está detrás del grupo del fondo.

Esta es la entrada al bonito y , con nieve, espectacular barranco que en pocos minutos nos lleva al Ibón. Se aprecia la huella a la derecha.

Como queremos alargar la ruta decidimos continuar unos centenares de metros más por la pista. Vemos ahora el poste de señales.

Panorámica del entorno.



Como pasado el poste anterior, el trayecto está menos pisado, encontramos un cambio en el estado de la nieve que pasa a ser algo costra, por lo que optamos por poner las raquetas. Una calima envuelve durante toda la mañana el paisaje.

A partir de aquí y con pendientes relativamente suaves, optamos por "navegar" en la nieve buscando la proximidad de las paredes de La Partacua.

Sin objetivo fijo, nos dirigimos a una cota imprecisa que en los mapas figura con 1.805 m.. Señalizada en el círculo amarillo. El enorme y kilométroco paredón Norte de la Sierra de la Partacua lo tenemos a nuestra izquierda.

Llegando a la cota, apreciamos abajo y brillante el Ibón de Piedrafita. Se ven las suaves laderas que nos permiten salir del habitual y superconocido recorrido al Ibón.

Desde la cota donde almorzaremos (brillante observatorio), se puede recorrer visualmente las montañas del entorno algo lejano y difuso por la calima.




Arriel y Palas.

El sol velado pero que calienta lo suficiente para poder ponernos en camiseta.

Iniciamos el descenso por las laderas de nieve en busca del Ibón de Piedrafita. Visible tras el grupo espeso de pinos.

Laderas suaves y sin dificultades pero por donde vamos trazando nuestras huellas.

Llegamos al Ibón de Piedrafita. Si continuáramos por la izquierda siguiendo el curso del visible regato, enlazaríamos con el acceso habitual al ibón desde la pista y que he comentado anteriormente. Hoy alargamos el recorrido buscando la salida hacia Plana Terrosa y que es también el inicio de la ruta que comunica el Ibón con el Arco Natural de roca de Piedrafita.

El Ibón y Telera. Alguno tuvo la tentación de atravesarlo por encima y creo que hubiera aguantado sin problemas, pero lo bordeamos por el norte, menos uno que lo hizo por el Sur.

El recorrido y sus suaves pendientes animan a la conversación.

Tras pasar un amplio colladete, se desciende hacia la zona de Plana Terrosa.  Aprovechamos las lenguas de nieve y sin descender demasiado vamos derivando en suave rumbo hacia la izquierda.

Otros compañeros que llevan su marcha. Nos reagruparemos pronto.

Si conocemos la zona podremos localizar el Arco Natural de roca de Piedrafita que suele visitarse habitualmente.


Tras reagruparnos, buscamos hacia el Este una valla que delimita el entorno del Parque La Cuniacha. Quizás es el punto de prestar mayor atención, pues nos pueden surgir las dudas de por donde continuar. La valla es muy larga, así que con orientarnos hacia Mandilar o Piniecho la encontraremos.

Y seguiremos dirección Norte durante unos 20 minutos.

En un momento pasaremos junto un idílico lugar donde en verano se mantiene un charco de agua, pero hoy se nos ofrece espectacular. Aunque hay huellas hacia el laguito, la ruta sigue por la izquierda y ya alejándonos de la valla que hemos seguido.

Hemos aprovecha unas huellas que nos han ayudado en la orientación, es lo que tiene visitar sitios muy transitados. No obstante existen unas estacas de madera que guían este tramo. Así llegamos a enlazar con la pista que hemos seguido a primera hora de la mañana. Tomaremos hacia la derecha para descender a la Cuniacha. Si siguiéramos de frente en suave ascenso, nos dirigiríamos al Ibón por pista.

Poste anterior.

Desde él por pista o acortando por los atajillos, llegaremos al aparcamiento en poco más de 20 minutos.

Con abundancia de nieve, esta zona es muy reconocida para las raquetas, aunque se suele centrar todo en la visita al Ibón o al Arco de Roca, este segundo más complicado con nieve. Pero navegar con tiempo por las laderas del entorno con agradable compañía, salir de las huellas y trazar las nuestras, seguro que nos hará aumentar las endorfinas.

Cortina de hielo en la carretera de acceso.

jueves, 21 de febrero de 2019

Pico Matapaños (1.534 m.). Sierra de Guara

Fecha:  9 de Febrero de 2.019

Ruta:  Aparcamiento de S. Julián de Banzo (775 m.)- Desvío Puerta del Cierzo (900 m.)- Barrera pista (1.070 m.)- Cuello Bail (1.316 m.)- Cima Matapaños (1.534 m.)- Cuello Bail- Collado Collicierco (1.406 m.)- Collado Sopilata (1.130 m.)- Aparcamiento.

Accesos: Desde Huesca tomar la carretera general hacia Barbastro. A los pocos kilómetros una desviación nos señala Loporzano, tomamos ese desvío y entramos en carreteras locales hacia Barluenga y después hacia San Julián de Banzo. Al llegar a las primeras casas, continuamos por la carretera que se dirige en leve descenso hasta el otro barrio de la localidad. Una cerrada curva a la izquierda nos da acceso a una pista a nuestra derecha señalizada hacia San Martín de La Val d`Onsera, la tomamos y en breve nueva pista marcada a la derecha. La seguimos unos 800 metros hasta un aparcamiento perfectamente señalizado y con mapa y paneles.

Horarios:     00:00 h. Salimos del aparcamiento.
                    00:45 h. Puerta del Cierzo, poste señalizador hacia Campos de Ziano (Ciano)
                    01:45 h. Barrera en la pista que viene desde Santa Eulalia La Mayor.
                    02:50 h. Cuello Bail. (hemos parado antes unos 15 m. para almorzar).
                    03:40 h. Cima del Pico Matapaños. Parada y fotos.
                    04:00 h. Iniciamos el descenso de nuevo hacia el Cuello Bail.
                    04:35 h. Cuello Bail.
                    05:30 h. Collado Collizierco. Parada para comer.
                    05:45 h. Continuamos descenso y circular.
                    06:20 h. Cruzamos el Barranco de las Gorgas.
                    07:05 h. Collado de Sopilata.
                    08:10 h. Llegada al aparcamiento.

Desniveles:  Acumulados 1.200 metros en ascenso y los mismos en descenso. 22,5 km. de recorrido.

Dificultad:  Media. La ruta no presenta dificultades técnicas, pero es larga y en algún tramo hay que conocer bien el camino para evitar despistes que en Guara suponen costosas pérdidas de tiempo y esfuerzo.


Hemos aparcado en la zona habilitada como aparcamiento para visitar en conocido monasterio rupestre de San Martín de la Val d`Onsera.

Hoy llevamos un guía de primera, Toño Bergua, que controla perfectamente la Sierra de Guara. Echamos un vistazo a los paneles informativos del aparcamiento.

Mapa con la ruta circular. Inicio y final en el aparcamiento señalado en la zona baja del mapa. Se sigue por la ruta amarilla hasta Puerta de Zierzo y después en rojo ruta en sentido contrario a las agujas del reloj.


La ruta comienza continuando la misma pista que hemos utilizado desde San Julián de Banzo. Ahora en un tramo levemente descendente.

Vamos en busca del Barranco de San Martín cuando la pista pasa a senda.

Pronto tocamos el fondo del barranco por cuyo cauce nos moveremos durante un tiempo.

Barranco seco. Dicen que el agua discurre a no se cuantos metros por debajo.

Barranco estrecho y muy curioso.


Según nos internamos en él, las paredes se van haciendo más elevadas.


Después de unos 45 minutos desde la salida, llegamos a un poste señalizador con una referencia a Campos de Ciano. Otra flecha dirige hacia el Monasterio, pero hoy no toca.

El camino a Campos de Ciano se torna empinado y nos va a sacar del barranco.


Contraste con luces y sombras en estos días de invierno.

La trocha nos llevará en 15duros minutos  a una pista algo abandonada.

La seguimos dejando a nuestra derecha los curiosos Campos de Ciano.

Continuamos buscando nuestros postes de señalización.

Ya nos marca Matapaños y el Cuello Bail nuestro siguiente punto de referencia.

Tomamos una pista nueva mucho mejor conservada que la anterior. Esta pista viene de otra población (Santa Eulalia la Mayor). Encontramos otra zona de aparcamiento para el caso de haber venido desde esa población.

Y pronto la pista se corta con barrera. Como vamos a pie continuamos por ella.

Señalo el Cuello Bail al que debemos llegar. La pista después de un tramo con buena dirección traza varias y largas revueltas para ganar altura.

Mientras observamos a nuestra derecha las paredes y cresta de Ligüerri


En la primera curva cerrada a la izquierda, dejamos la pista para alcorzar por un sendero algo huidizo.

Con paciencia se tira para arriba pues debemos superar sólo unos 150 metros de desnivel. Sobra ropa aunque estemos en febrero.

Las lazadas de la pista que evitamos y en el círculo el punto de arranque de la senda. No pasa nada por seguir la pista aunque meteremos más distancia y tiempo.

En el Cuello Bail parte un sendero señalizado hacia el Matapaños y Pozos de Nieve.

A los que se llega en pocos minutos.

Curiosos como otros muchos que conocemos en el Pirineo e incluso en otros territorios.



El sendero continúa decidido hacia arriba. No estamos lejos de nuestra cima, aunque la pendiente tomo cierta dureza.

Y aunque la mañana no es demasiado clara, pues se ve cierta calima, podemos ver las altas cimas pirenaicas. En el centros el Macizo de Monte Perdido con las Tres Sorores.

Y a la espalda la compleja orografía de la Sierra de Guara. La cima más elevada de la foto es el Tozal de Guara que apenas supera los 2.000 m. y es el punto culminante de la Sierra.



Terminada la dura rampa, una suave cresta nos permitirá alcanzar la cima del Matapaños.

Cortados del Barranco de San Martín que hemos abandonado hace unas horas.

Toño junto al hito geodésico.

Los demás vamos llegando.


Desde la cima y con zoom se pueden identificar numerosas montañas que ya conocemos. Collarada.

Monte Perdido y sus ayudantes.

Barranco de San Martín.

Foto de cima en compañía de Sara, Chema, Carlos, Toño y Marisa con su perro.

Iniciamos el retorno en busca de la cima Sur por la que hemos pasado en la subida.

Y derechos al Cuello Bail en la pista. A la vista los espectaculares Mallos de Ligüerri.

En el Collado Bail, tomamos la pista hacia la izquierda.

Foto desde el Collado con el Pico Taillón. Se ven perfectamente la Brecha de Roldán y el Casco de Marboré.

La pista que seguimos para ir cerrando nuestra circular discurre ahora por la base del Pico Matapaños por zona de umbría, lo que hace que se mantengan restos de nieve y de hielo.


Hasta el Collado Collicierco que es nuestra siguiente referencia la ruta está bastante bien balizada.

Las abruptas laderas del Pico Fragineto y asomando detrás la cima del Tozal de Guara (2.078 m.)



Último desvío hacia el Collicierco. Dejamos la pista y tomamos sendero.


Collado al que llegamos ya con 5h. 30 m. de recorrido.

Tras cambio de impresiones y como soplaba una brisa incómoda decidimos descender unos metros para comer algo antes de continuar.

En la lejanís el Picón del Mediodía, cima que debemos bordear por la derecha de sus enormes cortados para regresar a nuestro aparcamiento.

Nuestro sendero desciende en busca del Barranco de las Gorgas. Enfrente la Cresta de Ballemusa o de Balleclusa (según mapas). Antes de llegar a ellas, la senda gira a la izquierda.

Nos vamos acercando al Picón.

Pero antes vamos en busca del Barranco de las Gorgas.

Descenso algo abrupto.

Que nos lleva a una posterior nueva remontada. Detrás las crestas de Ballemusa o clusa.

Bordeamos los paredones del Picón del Mediodía y pasamos a laderas Sur.

El sendero es por esta zona estrecho y en algún tramo hay que ir con prudencia para no perder la traza.


Entramos en nuevo barranco que alberga el sendero de acceso a la cima del Picón del Mediodía, pero nosotros hoy sólo lo vamos a utilizar en descenso.

Metiendo tiempo y distandia vamos dejando atrás el tan nombrado Picón que se ve de fondo.

El terreno es agreste cuando vamos viendo la llanada de la Hoya de Huesca entre la neblina.

A la altura del Collado Sopilata o de la Sopilata, podremos ver al fondo la Peña de San Miguel.

Seguimos en descenso por sendero ahora más claro y despejado.

En busca de los lejanos campos donde se encuentra nuestro aparcamiento. Nos falta más de una hora para llegar a ellos.



Algunos tramos curiosos.
 La senda desciende de nuevo al Barranco de San Martín, pero más abajo del aparcamiento, así que toca remostar unos 80 metros de desnivel que a estas alturas de la jornada no hace mucha gracia. Aprisco bajo una pared del barranco.

Tras una subida alcanzamos una pista, que tomamos con dirección a San Julián de Banzo.



Que abandonamos por nuestra izquierda a otra, pues la que llevamos nos comunica con el pueblo y no con nuestro aparcamiento.

Las Peñas de San Miguel y de Amán. El conocido Salto de Roldán.

Toño, el guía, nos mete por el lateral de un campo que nos llevará al aparcamiento. Sólo él conoce este atajo.

Al que llegamos tras casi 8h15m. de marcha dura y con 22,5 kilómetros de un recorrido bastante rompepiernas. Misión cumplida.