Fecha: 5 de Septiembre de 2.021
Ruta: Aparcamiento de la Cleta del Rigüelo (1.470 m.)- Sendero al Pico de Aspe- Desvío y toma del GR11 (1.620 m.)- Entrada a la Garganta de Aísa (1.900 m.)- Paso de la Garganta de Aísa (2.330 m.)- Pico de la Garganta de Aísa (2.503 m.)- Pico El Sombrero (2.562 m.)- Barranco de los Mallos- Sendero del Aspe- Aparcamiento.
Accesos: Desde Jaca, al final del Paseo de la Constitución tomamos la carretera hacia la localidad de Aísa, son 24 Km.. Atravesamos la localidad y continuamos por la pista asfaltada que conduce en dirección Norte hasta el final del Valle de Aísa. La pista termina en una cancela metálica: La Cleta, aparcamos unos metros antes en el lateral.
Horarios: 00:00 h. Salimos desde el aparcamiento de La Cleta.
00:20 h. Dejamos el sendero al Aspe y tomamos a la derecha el desvío al Rigüelo.
01:15 h. Entramos en la Garganta de Aísa sobre la cota 1.900 m..
02:10 h. Paso de la Garganta de Aísa.
02:45 h. Cima del Pico de la Garganta de Aísa. Breve parada.
02:55 h. Continuamos hacia el Pico el Sombrero.
03:20 h. Cima del Pico el Sombrero. Parada y fotos.
03:50 h. Inicio del descenso.
05:05 h. Enlazamos de nuevo con la senda del Pico Aspe.
05:25 h. Aparcamiento y final de la ruta.
Desniveles: Acumulados 1.180 metros en ascenso y los mismos en descenso para una distancia recorrida de 11,8 km.
Dificultad: Media. El recorrido no presenta dificultades técnicas, pero hay que prestar atención en la zona de la senda Norte del Pico de la Garganta de Aísa y en el descenso del Sombrero en una zona de placas lisas.
Fotografía sacada hace unos años desde la cima del Pico Aspe. Señalo las dos cimas del día de hoy y parte de la ruta que se propone. El faldeo bajo las paredes Norte del Pico de la Garganta de Aísa parece más peligroso de lo que veremos en la reseña.
Ruta señalada en amarillo con el bucle realizado en el sentido de las agujas del reloj. En los mapas existen disparidades de nomenclatura con el Pico el Sombrero. La mayoría se inclinan por dar ese nombre a la cota que señalo con la flecha en rojo y así lo haré yo.
Parto de noche desde la conocida cancela de la Cleta de Aísa. Al otro lado continuamos por una pista de tierra que cuando toma pendiente se torna a pista de hormigón.
Desde pronto podremos ver silueteadas las cimas a ascender. Aspe no, claro.
Tras el tramo de hormigón la pista llega a un tramo el leve descenso en busca del desvío hacia el Aspe (círculo).
Desvío perfectamente señalizado. El día va clareando y parece que se presenta despejado. Lo previsto.
Seguimos por el sendero al Aspe que se perfila al fondo. Sendero bien trillado y cómodo en este tramo inicial.
A los 15 minutos de la salida alcanzamos un poste señalizador. Obviamos el desvío marcado y continuamos camino al Aspe.
Unos 5 minutos después abandonamos la senda al Aspe (flecha blanca) y tomamos un sendero por nuestra derecha que en leve ascenso pronto inicia un tramo en descenso.
Si nos pasamos este desvío y continuamos camino al Aspe llegaremos después de otros 5-8 minutos a un nuevo poste de señales en el que nos indica el GR11 hacia Canfranc, a la derecha, que tomaríamos.
Los dos senderos se vuelven a unir más adelante pero el propuesto economiza algo de desnivel y tiempo.
Nos encaminamos a la especie de circo bajo las cimas de Lecherines.
A la altura del primer círculo blanco enlazamos con el GR11 que viene de nuestra izquierda. Lo seguiremos por un corto tramo para dejarlo a la altura del segundo círculo.
Abandonando el GR camino de los Lecherín.
Vista atrás sobre el terreno recorrido.
Nuestra senda entra en terreno más rocoso y la encontramos menos pisada y con algunos hitos.
A nuestra izquierda vemos la entrada a la Garganta de Aísa.
Y a la derecha la ladera herbosa que cae desde los Mallos de Lecherín por la que cerraremos el pequeño bucle de cimas.
El sendero que entra en la garganta no es muy visible aunque existen algunos hitos dispersos.
Pero no hay equivocación posible sólo se trata de progresar por ella. Vista atrás. La gran roca con pinos encima es una buena referencia pues en ella cerraremos el bucle de la ruta en nuestro descenso.
De inicio, los hitos se pegan a la pared derecha de la garganta, aunque luego buscan la zona verde que resulta más cómoda de andar.
Ya en la zona final vuelven a la derecha. Es el tramo más incómodo con piedra más fina y deslizante.
Por abajo vienen dos colegas con buen ritmo.
Zona final de la garganta. Toda ella nos costará sobre una hora de fuerte pendiente. En sol la Arista de los Murciélagos hacia el Pico Aspe.
Arista que sería el destino final de los que me van dando alcance.
Llegada al Paso de la Garganta de Aísa (2.330 m.) punto de inicio de la arista citada.
Al otro lado, hacia el Norte, montes de la zona de Tortiellas y Candanchú. El Midi al fondo.
Arista hacia el Aspe.
Desde el mismo Paso de la Garganta y bordeando bajo las paredes norte del Pico de la Garganta de Aísa discurre un leve sendero que tomamos con confianza.
Por delante llevo otro colega con su perro. El paso es espectacular aunque sin nieve es sencillo.
El mismo paso visto desde el Aspe. Señalo un grupo en la zona de las fotos anteriores. Se va en busca de un colladito que hay entre las dos cimas de hoy.
Más espectacular que difícil.
Foto en el tramo de la foto anterior. Desde aquí no se tiene la impresión pues no se ven los cortados que hay hacia abajo.
Pronto el sendero sobrepasa un saliente para dejar a la vista el pico El Sombrero y su imponente cara norte.
También la canal que da acceso al collado que hay entre las dos cimas a ascender. Un nevero residual que pasaremos por abajo para remontar por los derrubios.
El compañero que llevo delante está ya en la parte final de la canal.
Una vez en los derrubios seguiremos los hitos y algunas señales de sendero. La pendiente no es tan fuerte como aparentaba desde lejos. En esta zona nos encontraremos con nevero hasta bien entrado el verano, en ese caso extremar las precauciones.
Vista hacia atrás con el ligero descenso del sendero para rodear por debajo el nevero.
Alcanzando sin más problemas el collado, aparece al otro lado el Valle de Aísa.
Visión de la canal superada desde el mismo collado.
Giramos hacia el Oeste para remontar los pocos metros que faltan para llegar al Pico de la Garganta. En los últimos metros hay una ligera y corta trepada que se puede casi evitar buscando bien los hitos.
El colega que llevaba por delante con el perro está ya de bajada. Paramos a charlar un momento y resulta que nos conocemos por el blog. Se trata de Angel con el que en semanas pasadas había tenido una conversación en los comentarios del blog. Después él siguió su ruta que básicamente coincidía con la mía.
Numerosos edelweiss en la ladera.
Llegada a la cima del Pico de la Garganta de Aísa con el Aspe detrás.
No paro más que unos minutos en la cima pero lo suficiente para localizar a los compañeros que me seguían en la zona de la Garganta de Aísa y que se encaraman a la Arista de los Murciélagos (círculo)
Con el zoom se les distingue mejor separados y situados en dos repisas distintas.
Foto con el Sombrero, siguiente cima de la jornada y más al fondo el Lecherín. Impresionan, pero la ladera Sur es muy practicable.
El Valle de Aísa.
Algunas cimas conocidas y silueteadas en la calima de la mañana.
Foto de recuerdo e inicio el descenso para retomar de nuevo el collado anterior.
Entre el campo de edelweiss.
Laderas de el Sombrero que ofrecen un leve sendero, aunque se puede ir casi por cualquier lado.
Vista atrás con el Pico de la Garganta de Aísa confundido con las paredes del Aspe.
Últimos metros para llegar al Sombrero.
Hito cimero (2.562 m.). Al fondo el Lecherín (2.565 m.).
Angel está ya descendiendo hacia Rigüelo.
El Aspe. Las vistas desde esta cima son parecidas a las del anterior pico.
Desde aquí se ve muy bien en la sombra el Barranco de los Mallos por donde descenderé más tarde.
Hacia el Este mala visión con el sol de cara y la brumilla.
El Pico Lecherín que por el Norte lleva la Faja Volandera que permite un acceso a su cima (será para otra ocasión.)
Los Mallos de Lecherín que dan nombre al Barranco.
Foto de cima. Contrariamente a lo visto en alguna foto anterior, la cumbre de este pico no es puntiaguda, sino más bien plana y algo indefinida.
Hacia el norte, el gran cortado nos da vista al Ibón de Tortiellas Bajo, colmatado como otros varios del entorno de estos Valles Occidentales. El arroyo que lo surca presenta numerosos meandros.
Panorámica hacia el Norte.
Y zoom hacia los lejanos Anie, Mesa de los Tres Reyes y Petrechema.
Otro al hito cimero del Aspe donde extrañamente no hay nadie a pesar de ser domingo.
Después de picar un poco, desciendo en busca de la vira y placas lisas que al Oeste del Pico Lecherín dan paso al Barranco de los Mallos. No es necesario llegar al Collado entre Lecherín y Mallos de Lecherín, sino que la misma ladera nos irá llevando.
Pico Lecherín y Faja Voladera que parte bajo el morro del centro.
Pero nosotros buscamos la vira que se marca bajo las paredes Oeste.
Vista hacia atrás en plena vira.
Una serie de placas algo lisas pero de media pendiente que en seco se pasan bien. Después descendemos al centro del barranco.
Las placas.
Hasta un poco más adelante no encontraremos el sendero que por el barranco da acceso al Collado de Lecherines. Estamos en una pedrera con presencia de hitos.
Vista atrás con la ruta por la vira y placas lisas. El Pico el Sombrero es el de la izquierda. Si accediéramos al collado de la derecha podríamos abordar el Pico Lecherín por el Sur.
Ampliación de la foto anterior con la zona de placas.
Un poco más abajo y saliendo de la pedrera iremos descubriendo con mayor claridad un sendero que seguiremos en descenso.
Pico de Aspe y zona de lapiaces que dejamos a nuestra derecha.
Sin más incidencias llegamos a la gran piedra con pinos que al inicio de la Garganta de Aísa comenté que sería nuestra referencia y donde cerramos el bucle de cimas.
En la vista atrás se ve la ladera de descenso por la derecha. En esta ladera hay sendero e hitos.
Y desde aquí tomamos el mismo camino que ya conocemos por coincidir con el de ascenso.
Vista atrás hacia el Rincón de los Mallos.
Retomamos el sendero al Aspe pero en descenso. Por aquí se ve más gente.
El Refugio de Saleras cerca de la pista.
Tramo hormigonado que pasé a primera hora en plena oscuridad.
Y llegada al aparcamiento de la Cleta donde a esta hora había ya muchos vehículos.
Se cierra esta ruta que en un tramo era inédita para mi y que ha resultado verdaderamente atractiva.