martes, 31 de diciembre de 2013

Punta Güé (1.570 m.)

Fecha: 11 de Diciembre de 2.013
Ruta: Cruce en carretera de Sabiñánigo a Biescas (850 m.)-Corona Morral (940 m.)-Pardina Güé (1.250 m.)-Punta Güé (1.570 m.). Retorno por la cresta de Santa Lucía.
Acceso: Desde Sabiñánigo o Jaca, tomar la carretera a Biescas. A los pocos metros se atraviesa el puente sobre el río Aurín Y se llega a una recta con Gasolinera de Repsol. Nada más iniciar la recta, a la izquierda, una pista asfaltada nos lleva a dos naves de aperos, donde podremos dejar los vehículos. Nota: Esta pista no tiene prohibición para vehículos y se puede llegar a la misma Punta Güé en coche.
Duración: 2h.30m. de ascenso y 1h15m. de descenso.
Desnivel: 720 metros en ascenso y en descenso.
Dificultad: Muy Fácil.

La Punta Güé es uno de esos picos que no llaman la atención. Situada a la entrada del Valle de Tena y muy próxima a Sabiñánigo, nos dará la sorpresa de unas inusuales vistas de la Val Ancha, Valle de Acumuer y Tena.
En la foto, la punta Güé desde la última parte del recorrido.
Aparcamos los coches a unos 300 metros del cruce de la carretera general. La mañana fresca pero agradable. Estamos en Diciembre y no se puede pedir mucho calor.

El recorrido en verde. Hasta la Punta Güé por la parte izquierda del bucle se transita por pista de tierra (en bastante buen estado). El retorno por la derecha del bucle es sendero hasta enlazar con la ruta de ascenso.
Durante más de media hora, la pista discurre por una zona de corona (zona más o menos llana que domina el entorno). En los campos despunta el cereal y como fondo Collarada (2.886 m.).
También la alargada forma de Peña Oroel.
Como he comentado anteriormente, es ruta de vistas novedosas . La Val Ancha que comunica Sabiñánigo y Jaca.
Sabiñánigo y sus fumarolas. Allí las llaman nieblas.
Tras una larga recta, la pista toma un desvío dirección norte y comienza a zigzaguear entre un bosque de Quejigos o Cajicos.
Veremos abajo la localidad de Larrés con su Castillo y Museo del dibujo.
Nosotros continuamos por la pista con alargadas sombras.
La Punta Güé la divisamos casi desde el inicio del recorrido. Ahora algo más cerca podemos distinguir la torre de vigilancia situada en la cima.
La pista es larga, pero ofrece en un momento una bella vista del Valle de Acumuer y su entorno. Pronto toma mayor pendiente.

Cambiamos el bosque de cajicos y entramos en una zona más umbría con pinar.
La nieve, escasa, hace acto de presencia en esta zona más umbría.
Llegando a la cima, la pista da vistas hacia el Valle de Tena. Al fondo a la izquierda el Balaitús (3.144 m.) y en el centro las Argualas (3.045 m.)
La torre ya a mano.
Último empujón y tras 2h.30m. llegamos a la cima.

Muy buenas vistas. Pedro y Gerardo. Detrás el macizo de Monte Perdido.
Las Tres Sorores: Cilindro de Marboré, Monte Perdido y Soum de Ramond.
Panorámica de la Val Ancha. En primer plano y a la izquierda se aprecia el cordal verde que usaremos en el descenso.
Un primer plano de la torre de vigilancia contraincendios, operativa en verano.
Panorámica hacia el Pirineo. El Valle de Tena.
Reponemos fuerzas durante un buen rato. A esta hora la temperatura es agradable y las vistas también.
Iniciamos el descenso por sendero bien marcado.

Vamos dejando atrás la Punta Güé.
Más próximos a los vehículos y antes de retomar la pista de ascenso-descenso, una visión de Sabiñánigo. Bonita mañanera en la que tendremos que tener paciencia con la pista de ascenso y que nos proporcionará vistas inéditas en diversos puntos del recorrido.

domingo, 22 de diciembre de 2013

Monte Grosín (1.422 m.). Fin de temporada grupo Turbodiesel. Belén.

Fecha: 18 de Diciembre de 2.013
Ruta: Pista de puente Las Grajas-Vértice Grosín
Desnivel: 500 metros
Duración: 1h.30m. de ascenso y 1h. descenso

Ultima salida Turbodiésel de la temporada 2.013. Como siempre, la colocación del Belén en Vértice Grosín. Salida algo atípica pero entrañable.
Nos reunimos como casi siempre en Casa Luis (estamos en Jaca), donde nos atienden siempre y bien desde muy temprano en toda época del año. Hoy la salida es ligera y con la colocación del Belén, el grupo es amplio.
Llegamos con coches a la zona de inicio prevista, en la pista de las Grajas al Grosín. Algunos del grupo la habían recorrido unos días antes y recomendaron estacionar antes de unas curvas llenas de hielo.
A tramos por pista, pero la mayor parte por sendero nos movemos por un bosque de pinar repoblado.
Así llegamos a un collado que da a la vertiente oeste. El ambiente es relajado así como el ritmo de marcha.
Pista clara hacia Grosín. El día ni frío ni caluroso nos permite una conversación agradable en la marcha. Cómo no, se oye hablar de todos los temas imaginables. Me quedo con los buenos: Muchos chistes  y cómo no "los nietos".
Ya camino al Grosín, se ven las mochilas como infladas para una ruta tan sencilla.
A la vista el modesto Grosín (1.422 m.).  Conocemos casi de memoria esta ruta.
El último repechón es de 15 minutos muy empinados, pero el objetivo está cerca y la recompensa también.
Llegamos al vértice. Las nubes no nos gratifican con una buena panorámica, pero la montaña es a veces así.
Junto al Vértice existe una antigua construcción "depósito de agua dicen" que formará parte del segundo acto de la jornada.
Situado en el Vértice Grosín, en el punto más elevado de la Sierra de Angeles,  desconcierta el sentido de su construcción.
Pero los Trurbodesel tienen el plan perfectamente señalado.
A la voz de a vaciar las mochilas, aparecen los elementos precisos para una despedida de temporada de montaña (como dios manda).
Infiernillos,sartenes,aceite,raseras,huevos,jamón,platos,cubiertos,langostinos,salsa rosa (made in Jesús Tomás), botas de vino (el de Casi causó sensación), turrón, mazapanes, cava o espumoso (gran discusión),café, te, orujo y seguro que algo más constituían la logística del día.



Por supuesto que todos nos aplicamos debidamente por no hacer de mal a los cocinillas.
Y los hubo que repitieron. Ojo al colesterol.

Una vez repuestas las fuerzas, se instala el Belén.
Villancicos y turrones como es tradición.
También brindis y felicitaciones.

Los desenmascarados una vez recogida y limpia nuestra cocina. Ya sólo queda retornar a los vehículos con agradable, y a veces, lenguaraz conversación.
En el inicio del descenso la Peña Collarada se levantó sobre las nubes del día. Esperemos que sea un buen augurio para los Turbodiésel en 2.014. FELIZ NAVIDAD.