domingo, 30 de septiembre de 2018

Monte Perdido (3.355 m.). Ruta de las Escaleras.

Fecha: 23 de Septiembre de 2.018

Ruta: Parada del Bus de Nerín en Ciarrazils (2.180 m.)- Cuello Gordo (2.200 m.)- Refugio de Góriz (2.160 m.)- Cruce hacia Punta Escaleras (2.500 m.)- Punta Escaleras (3.027 m.)- Monte Perdido (3.355 m.)- Lago Helado (3.000 m.)- Refugio de Góritz (2.160 m.)- Parada del Bus (2.180 m.).

Accesos: Larga ruta desde Jaca o Sabiñánigo. Desde este último tomamos la N260 hacia Fiscal. Llegamos a su rotonda de entrada y tomamos a izquierda dirección Broto o Torla. Tras 10 Km. Se llega a Sarvisé, Cruce a derecha dirección Fanlo. Carretera estrecha y delicada (se recorre de noche). En unos 20 minutos llegamos a la entrada a Fanlo, pero continuamos en descenso dirección a .... al mundo. Después de otros 10 minutos de estrecha carretera, un cruce nos marca a izquierda a Nerín. En dos km. llegamos al pueblo y si es de noche, como hoy, veremos sin duda las luces del bus. Aparcamos cerca. Tras pagar los billetes 20Eu. ida y vuelta, el bus nos llevará al punto de partida.

Horarios: 00:00 h. Salimos desde la parada del Bus en Ciarrazils.
                01:35 h. Refugio de Góritz. Parada.
                01:50 h. Continuamos por la ruta al Lago Helado, la habitual a Monte Perdido.
                02:25 h. Desvío hacia Punta Escaleras ( Cota 2.500 m.)
                03:35 h. Punta Escaleras o Escaleretas. Breve parada.
                03:45 h. Seguimos hacia Monte Perdido.
                05:00 h. Cima de Monte Perdido. Parada larga.
                05:40 h. Iniciamos el descenso.
                06:20 h. Lago Helado (hoy no helado).
                08:00 h. Refugio de Góritz. Breve pausa.
                09:50 h. Llegada a la parada del bus.

Desniveles:  Acumulados nos daban 1.600 metros en ascenso y los mismos en descenso con una distancia de 21 km.

Dificultad: Alta. Nos movemos por encima de los 3.000 metros durante varias horas. Los resaltes de las escaleras suponen cierta pericia en las trepadas que además no se aseguran.             
              

Fotografía de Monte Perdido y Punta de las Escaleras desde el Taillón.

En el mapa señalo la primera parte de la ruta hasta el Refugio de Góritz. Recorrido sin apenas desniveles. Hay que recorrerlo de ida y de vuelta.

Subida al Monte Perdido por la Punta Escaleras o Escaleretas. Descenso por el Lago helado.


La ruta se inicia en la parada del Bus de Nerín a la altura del mirador de Ciarrazils. El Bus ha llegado al completo e incluso han tenido que poner una pequeña furgoneta añadida. Sacamos las mochilas e iniciamos el recorrido. Son las 07:45 h. y el amanecer ofrece una coloración especial.

Somos un grupo grande lo que hace ser, quizás, más lento. Pero eso serán sólo apariencias, pues el grupo pronto toma ritmo de crucero.

En diez minutos una rampa herbosa nos lleva hasta el Mirador de Ciarrazils con vistas a las Tres Sorores.

Y también nos imaginamos el recorrido. Las cimas muy lejanas. Tardaremos casi 10 horas en regresar a este observatorio privilegiado.

Unas rápidas fotos y ya en fila de a uno nos encaminamos por un sendero que bordea los cortados de Ordesa camino de un collado: Cuello Gordo.

Algunos, quizás con otros cometidos, se entretienen en el mirador con la sierra de Tendeñera detrás y ya soleada.

Pasamos por Cuello Gordo con sombra y temperatura perfecta para andar. Las Treserols como fondo permanente.

De cuando en cuando nos podemos ir asomando hacia el Cañón de Ordesa. Abajo la reconocida Cascada de la Cola de Caballo. Se aprecia el sendero que por el fondo del valle lleva al Refugio de Goritz.

Nosotros continuamos por nuestro camino. Llegar hasta el Refugio desde la parada del Bus son 6,5 km. en los que no se gana altura.
 Eso no quiere decir que no tengamos pequeños sube y baja que por la mañana son inapreciables, pero que los notaremos más a la hora de regresar.

Tras 1h.30m., alcanzamos el refugio. Por supuesto que los que han pernoctado en él ya deben estar camino de sus cumbres. Son aproximadamente las 09:20 h.

Tras una mínima parada tomamos la senda que da acceso a Monte Perdido por la llamada ruta del Lago Helado (la ruta habitual de ascenso). Abajo va quedando el Refugio de Góritz.

Este primer tramo lleva cierta pendiente y ya con sol comienza a subir la temperatura.

Seguimos con buen ritmo mientras va abriéndose el horizonte.

El Refugio está a unos 2.170 m., cuando llegamos sobre la cota de los 2.500 en el propio sendero al Lago Helado, nos aparece a la derecha una clara canal y canchal con algún hito señalizador. Es el punto en el que dejamos la senda al Lago y entramos en nuevos dominios, los de la Punta de las Escaleras.

La canal es pendiente pero tiene senderillo. Tampoco es larga como para agobiarse. Ya llegarán luego otras "cosas".

Apenas 100 metros de desnivel que superamos por la cantalera para llegar a una especie de colladito.

El él hacemos una pequeña parada y recogemos los bastones, pues a partir de aquí van a comenzar las escaleras.

La primera, cortita, nada más dejar este colladete.


Colladete que vamos dejando abajo. Encontraremos trazas de senda que en ocasiones serán claras y en otras nos moveremos siguiendo hitos.

Un segundo resalte que se supera con ayuda de las manos.


La ladera no tiene referencias claras y la Punta de las Escaleras no es visible, así que entre escalera y escalera nos moveremos como algo perdidos,  es importante seguir las señales de paso y los hitos.

Parada entre escaleras. El Pico está a la ¿izquierda, derecha o centro?. Seguiremos las marcas.

El panorama es cada vez más espectacular. Atrás el Valle de Ordesa y en amarillo la ruta desde la parada del Bus hasta el Refugio. Esta foto estará sacada sobre los 2.800 metros, así que el Refugio de Góritz queda 600 metros más abajo.

Seguimos ganando altura esperando la aparición de la Punta de las Escaleras. Guillaume va por delante y a alguno nos va sacando un poco de punto. Se dedica a las carreras por montaña y aunque va parando a menudo, su ritmo nos supera a algunos. Alguien dijo "yo también fui joven".

Nuevos panoramas del Valle con la Punta Tobacor.

El cuarto resalte nos deja próximos al primer tresmil del día. Hasta ahora las trepadas han sido sencillas, aunque sabemos que las que dan paso a Monte Perdido tienen un punto más.

Un semirrellano que nos dará paso a la arista de cima de la Punta Escaleras. Entraremos de izquierda a derecha.

Abajo se puede divisar la línea blanquecina del sendero al Perdido por el Lago Helado y que dentro de unas horas usaremos para nuestro descenso.

Como he comentado, la llegada a la Punta Escaleras la hacemos por la arista Oeste, sin dificultad.

Grupo en la Punta Escaleras (3.027 m.). A la izquierda el Pico Añisclo o Soum de Ramond.

El grupo en la cima. Al fondo y derecha el Cilindro de Marboré. Hemos tardado unas dos horas desde el Refugio.

Hacia el Norte observamos lo que nos queda hasta el Perdido. No es un gran desnivel (unos 350 metros), pero hay que superar las dos últimas escaleras marcadas en blanco. También nos moveremos por encima de los 3.000 metros y todo cuesta un poquito más.

Dejamos atrás el hito de la Punta Escaleras con el Cilindro de Marboré.

Y nos encaminamos en dirección Este. Un pequeño resalte en descenso nos permite llegar a otro amplio collado.

Y siguiendo huellas e hitos buscamos la siguiente escalera.


Aquí tiraremos más de manos que en las primeras. El grupo se ha movido en otras ocasiones por territorios parecidos y salvamos sin más complicaciones el resalte.


Su continuación también lleva a terrenos "entretenidos".

Una pequeña zona de cascajos nos deja bajo la última escalera. Es la más vertical y ofrece una cuerda que nos parece algo precaria. Además, no sabemos como está anclada arriba por lo que procuraremos no usarla. Nos pegaremos a la grieta de la izquierda.



Superado este último obstáculo, sólo quedan 150 metros de desnivel hasta la cima.

El terreno es ahora más fácil aunque incómodo por ser una pedrera inestable. Algunos síntomas de calambres en las piernas, también me hacen ralentizar la marcha.

Finalmente accedemos a la cumbre, que como era de esperar, está ocupada por bastante personal. La suerte es que es ámplia y cabemos todos.




La cima tiene un hito geodésico y recientemente se ha colocado una chapa de hierro con la forma de San Jorge (esperemos que dure). El San Jorge está en la foto abajo y a la derecha cosido de cintas de todo color.

Estaremos unos 40 minutos en la cima y aprovecharemos para picar algo y disfrutar del Pirineo en esta mañana tal clara y templada.

Hacia el Norte la Brecha de Tucarroya donde hay un pequeño refugio. A sus pies el Lago de Marboré.

Foto en la cima con el Cilindro de Marboré detrás.

El Valle de Pineta.

Cañón de Añisclo.

El Posets.

En primer plano el Pico Añisclo.

El Valle de Ordesa.

Vignemale con su glaciar.

Iniciamos el descenso no sin antes fijarme en un recuerdo junto a la cima. Emotivo.

Tomamos ahora el trillado sendero que en dirección Norte nos baja hasta una planicie previa a la rampa de la Escupidera.


Nos alejamos unos pocos metros del sendero para asomarnos hacia el glaciar de Monte Perdido. Comprobamos lo pequeño que va quedando.

De inmediato iniciamos las pendientes rampas de la cantalera que baja directa hasta el Lago Helado que se ve bastante abajo.


Vistas hacia el Cilindro de Marboré. A su derecha el Cuello del Cilindro que nos permitiría acceder al glaciar.

Llegamos al Lago Helado donde hacemos una pequeña parada. Incluso hay quien se anima a meterse en las frías aguas hasta las rodillas. Se aprecia a la derecha el sendero que en diagonal nos daría acceso al Cuello del Cilindro. Hoy no tocaba.

Una vista atrás hacia el Perdido y la famosa rampa de la Escupidera.

Continuamos el descenso pasando por una zona preparada para vivacs.

Este sendero que es la ruta habitual de ascenso está muy pisado, nada que ver con la nuestra de las Escaleras.

Hay un tramo equipado con cadena y un par de resaltes que no tienen más dificultad que la de encontrarnos con la roca muy pulida y resbaladiza por el paso de tanta gente.

Más adelante alcanzaremos el punto de desvío de esta mañana.

Y por fuerte pendiente alcanzamos el Refugio. Se aprecia la última ampliación del mismo.

Paramos un rato, poco, pues hemos quedado a las 18:00 h. con el conductor del Bus y no es cosa de llegar tarde.

Así que tomamos camino hacia Cuello Gordo. Van a ser casi dos horas que con el calor se suelen hacer realmente pesadotas.

Podemos contemplar el Valle de Ordesa con luces diferentes a las de la mañana.

Atrás queda Monte Perdido.


Llegamos a la parada con quince minutos de adelanto. El Bus ya estaba esperando. Cansados pero satisfechos de una jornada para el recuerdo.
Agradezco a algunos compañeros: Marisa, Israel, Chema, Guillaume y algún otro que me olvido casi seguro, por facilitarme alguna de las fotos del reportaje.