Ruta: Aparcamiento de Col de Ladrones (1.340 m.)- Valle de Izas- Refugio de la Vuelta de Iserias (1.900 m.)- Ibón de Samán o de Iserias (2.130 m.)- Collado de La Moleta (2.440 m.)- Pico de La Moleta (2.575 m.)- Refugio de Buenavista (2.150 m.)- Fuente de Elvira (2.120 m.)- Caseta del Vasco (1.875 m.)- Praderas de Picaubé (1.450 m.)- Aparcamiento.
Accesos: Para este día y dado que debemos llegar al aparcamiento de Col de Ladrones, nos desplazaremos hasta la localidad de Canfranc Estación. Atravesamos toda la localidad y a la salida de ésta, en una gran curva a la izquierda veremos restos de una cantera, frente a ella parte una pista de tierra que atraviesa el río Aragón por un puente. La seguimos dejando a nuestra derecha un par de desvíos que no tomamos. La pista toma dirección norte y tras unos dos kilómetros llegamos a una gran explanada a la altura de las fortificaciones de Col de Ladrones. Aparcamos.
Horarios: 00:00 h. Salimos desde Col de Ladrones.
01:35 h. Cabaña o Refugio de Iserias.
02:10 h. Ibón de Samán o de Iserias.
02:50 h. Collado dela Moleta.
03:05 h. Cima de la Moleta. Parada.
03:20 h. Inicio el descenso.
03:45 h. Desvío clave hacia la caseta de Buenavista.
04:05 h. Caseta o Refugio de Buenavista.
04:15 h. Fuente de Elvira.
04:35 h. Caseta del Vasco.
05:20 h. Pista de Picaubé.
05:40 h. Aparcamiento de Col de Ladrones.
Desniveles: Acumulados 1.320 m. en ascenso y los mismos en descenso para un total de 17,2 Km.
Dificultad: En esta época de agosto Fácil recorrido con senderos visibles y señalizados. Sólo hay un punto que puede resultar confuso para tomar el desvío que nos llevará al Refugio Buenavista. Se verá más adelante.
La Moleta vista desde la Cresta Este hacia la Tronquera en otra fecha.
Ruta en amarillo. Al tratarse de una ruta circular, podemos elegir el sentido de la misma. Hoy la he hecho partiendo del aparcamiento (círculo negro de arriba) en el sentido de las agujas del reloj.
Salgo todavía en oscuridad, por lo que estas primeras fotos son de otra jornada. Aparcamiento, tomamos de frente una pista un poco descendente.
Que dirección Este busca adentrarse en el bonito Valle de Izas.
Tras unos cinco minutos un desvío señalizado en el que abandonamos la pista. Tomamos la GR 11 o la PR hacia Iserias. El horario marcado al Ibón es exagerado pues yo tardé 2h10m. sin correr. Esta mala foto si es del día de autos.
El sendero continúa durante un rato en un sube y baja por bosque.
Hasta que para acceder a la zona amplia del Valle, supera ahora con fuerte pendiente una pedrera.
Entrada a la zona ancha del Valle. A partir de aquí todas las fotos son del día de la ruta.
El sendero es ahora muy cómodo y agradable. Alguna indicación, en este caso a Formigal, que seguiremos.
Los barrancos de nuestra derecha y que bajan del Circo de Samán con poco caudal.
Tras aproximadamente una hora desde el inicio, llegamos a una roca característica en medio de los prados. Es como un enorme dado. Allí tomamos el desvío del sendero de la derecha. El que continúa de frente es el GR11 a Formigal por el Collado de Izas.
En el gran "piedro", encontramos nuestra señalización. No creerse el horario al Ibón, hay que quitar casi una hora.
El sendero en cómodas lazadas nos va introduciendo en el Circo de Samán. El Ibón está allí, detrás. La ruta nos lleva por dos fajas enlazadas, se juntan en el refugio de Iserias o de la Vuelta de Iserias. Supongo que lo de la vuelta se puede referir al cambio de dirección del sendero.
Las dos fajas son anchas y metidos en ellas no da la sensación que veíamos desde abajo.
El Refugio.
Situado en un lugar solitario y estratégico con buenas vistas hacia Candanchú y hacia el Valle de Izas. Está abierto y lo encontré barrido, la cubierta se mantiene bien. Aunque es pequeño, puede servir perfectamente para un apuro.
Candanchú y Valle de Canfranc.
El sendero da "la vuelta" y toma la faja superior.
Que sigue cómoda y amplia. La pendiente se mantiene suave hasta el tramo final que da acceso al Ibón, momento en el que se endurece algo.
Las dos fajas y " la vuelta".
El Valle de Izas a las nueve de la mañana.
Última rampita para llegar al Ibón de Samán o de Iserias. Alcanzo a otro colega. Aparece por primera vez la cima de La Moleta. Desde aquí nadie podría decir que no es como una muela.
El Ibón queda recogido en una pequeña cuenca. No tiene desagüe aparente, por lo que es de suponer que lo tendrá subterráneo. Una reja en el extremo opuesto nos indica que también se aprovechan sus aguas para el complejo de la Central eléctrica de Canfranc.
Descenderemos hasta su orilla y la recorreremos por la derecha.
Hasta localizar unas señales de sendero y algunos hitos.
La bajada al Ibón.
La traza nos va metiendo sin problemas en la vaguada que da acceso al Collado de la Moleta.
Al que llegaremos en diagonal desde la derecha. Al fondo nuestra Moleta.
El Collado nos cambia de visión. Montañas del Valle de Canfranc. A este collado se llega también por otras rutas de ascenso.
Desde aquí el claro sendero nos encamina hacia los pasos de la muela. Apenas nos quedan 15 minutos para hacer cima.
Mirada hacia el Ibón de Samán y en el círculo el punto por donde hemos llegado al mismo.
El sendero nos acerca a una zona de chimeneas o canaletas que nos van a permitir acceder a la zona alta del pico.
Una mirada atrás.
Encontraremos hitos. La canaleta más habitual es esta. La foto engaña muchísimo, pues es bastante más tendida. No ofrece ninguna dificultad.
Nuevos hitos con Collarada a la vista.
Los últimos metros son de ladera suave hasta llegar a la pica que marca la cima.
Desde la cima el Ibón de Samán y el Valle de Izas.
Una panorámica de referencia.
Con zoom, picos del entorno del Valle de Izas.
Candanchú. En la lejanía y a la izquierda el Anie.
En la cima. Esta pica metálica la conozco desde mi primera ascensión hace ya años.
La Cresta de la Tronquera que nos permite llegar sin agobios, aunque sí con esfuerzo a la Pala de Ip.
A la derecha de la foto el Collado de la Moleta (se aprecia senda) y en el círculo el Refugio de Buenavista por donde voy a efectuar el retorno. Pero en lugar de hacerlo por el collado voy a descender por otra ruta para completar una circular plena.
El Refugio de Buenavista. En cuanto inicie el descenso tardaré unos 50 minutos en pasar por él.
Abandono la cima cuando llegan nuevos visitantes.
Iremos buscando alguna de las fáciles canales que descienden en dirección Sur o Suroeste. La que hemos utilizado en el ascenso tenía orientación Noroeste. Son canaletas cortas y con buenos escalones. Es la ruta que utilizaríamos para ascender a la Moleta si venimos por el llamado sendero del Carretón.
Tras salvar la canal, tenemos una larga ladera que va perdiendo pendiente según descendemos. Mirada atrás. Este tramo está señalizado con hitos que tampoco están puestos de forma regular, pero la dirección es clara y visible.
En blanco las instalaciones del Carretón (referencia). No llegaremos a ellas, sino que estaremos pendientes de los primeros pinos que encontraremos en nuestro camino (amarillo).
En la foto se aprecia la traza de nuestra senda de descenso. A la altura de estos pinos veremos las nuevas marcas de pintura Amarillo-Blanco, pero no las seguiremos en descenso pues nos llevarían hacia las instalaciones del Carretón y nuestra intención es llegar al refugio de Buenavista. Buscaremos junto a los árboles las pintadas que pasan casi desapercibidas.
Este es el punto clave y que es importante no pasarse. Recordar: primeros pinos, pinturas amarillo-blanca y no descender más. El nuevo sendero PR nos lleva unos pocos metros entre los árboles sin perder altura. Dirección casi Norte.
Y pronto ya en terreno más despejado se hace más claro y visible.
Incluso tendremos algún tramo en ligero ascenso.
Seguiremos las marcas de pintura y algunos hitos.
La senda nos lleva al Barranco del Borreguil que cae desde el Collado de la Moleta.
En esta zona seguiremos con precisión las marcas de pintura. Empezamos a encontrar antiguas obras de contención de aludes y en ocasiones trazas de senda erróneas. Seguimos la pintura.
Pasamos a la ladera opuesta del barranco. Ya estamos cerca del Refugio de Buenavista.
En un punto la senda se bifurca. Derecha en ligero ascenso hacia el refugio e izquierda en ligero descenso hacia Canfranc. Junto al hito (círculo blanco), vemos una extraña pintada.
Nos marca la bifurcación. Las dos son PR.
La nuestra es la de la derecha.
Dos minutos y estamos en Buenavista. Refugio recientemente arreglado. Abierto y con capacidad suficiente para un grupo.
En su pared la señal que combina con la que habíamos visto hace unos metros. Hacia el Carretón La Moleta, por donde hemos descendido y el desvío directo a Canfranc.
Me asomo a un pequeño saliente a unos metros del Refugio para comprobar lo de Buenavista. Canfranc Estación abajo.
Y el Fuerte de Col de Ladrones desde donde hemos partido y donde hemos de llegar.
La senda continúa por detrás de la Caseta y aprovecha restos de obras y muretes en busca de la Fuente de Elvira.
A la que se llega en 10 minutos. Siempre la he visto con agua, incluso hoy tras un verano de sequedad extrema.
Sólo queda seguir el sendero en descenso.
En una mirada atrás, en blanco la Fuente de Elvira y en rojo el Refugio de Buenavista.
Vamos en busca de la Caseta del Vasco. Toda esta zona está plagada de obras y el sendero transita con pendiente suave y numerosas lazadas.
Un obstáculo.
Por esta zona encontraremos diversas señalizaciones. Buenavista de donde venimos y Picaubé hacia donde vamos.
Alcanzamos la Caseta del Vasco. Ruinas. Continuamos descendiendo por sendero claro.
Y señalizado. Picaubé. No atender al horario marcado. A la Pista de Picaubé sólo nos costará una hora bajando rápido pero sin correr.
Sendero muy agradable con la única mención de su poca pendiente lo que si en subida lo hace cómodo, en descenso se hace cansino.
Una sirga en un tramo que no sirve para nada, al menos en verano.
Ventanas entre las copas de los árboles.
Nuevas señalizaciones.
Así con paciencia llegamos a la pista de Picaubé. A la derecha de la foto se ve el poste indicador.
La pista de Picubé es libre al tránsito de vehículos, aunque recorrerla a pie, en otoño y con humedad ambiente es una idea magnífica. En la pista tomamos a la derecha en ascenso.
Tras 200 metros la pista finaliza en las praderas de Picaubé donde existen varios bunker defensivos.
Si queremos los podemos visitar (poste). Nosotros seguimos por sendero hasta otro inmediato poste.
Que nos marca el sendero a Col de Ladrones (nuestra meta). Sendero difícil (en el cartel).
No es para tanto. Hay alguna cadena en cierto tramo inicial, pero más para evitar resbalones y culadas con el terreno mojado o helado.
Son sólo unos minutos de sendero que nos lleva a la pista de vehículos que hemos usado como acceso. La seguiremos en ascenso hasta el círculo negro donde terminamos esta interesante circular al Pico de la Moleta.
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