Vuelta a los Mallos de Riglos

Fecha: 16 de Marzo de 2.014
Ruta: Riglos pueblo (650 m.)-Vaguada entre el Mallo Fire y el Mallo Pisón- Collado de los Mallos (1.000 m.)- Retorno a Riglos por el Mallo Colorado.
Acceso: Desde Jaca tomar la N-240 dirección Pamplona hasta Puente la Reina (20 Km. desde Jaca), aquí seguir por la A-132 dirección Huesca. Pasaremos por la localidad de Murillo de Gállego y al poco sale a izquierda el desvío a Riglos.
Duración: 1h.15m. hasta el Collado de los Mallos (ascenso) y 1h. desde el Collado hasta Riglos (descenso). 2h15m. total.
Desnivel: 350 m. en ascenso y lo mismo en descenso.
Dificultad: Fácil recorrido apto para todos los públicos.

Pasear una mañana o una tarde por el entorno de los Mallos de Riglos, no deja de ser adentrarse en la historia geológica del prepirineo oscense. Acostumbrados a las calizas y al granito de la zona pirenaica, los conglomerados rojizos de las paredes de Riglos llaman siempre la atención.

Foto típica de Riglos y sus Mallos.

La ruta propuesta nos permite adentrarnos en este mundo de rocas redondeadas unidas por una dura argamasa y que hacen de ellos un particular mundo de escalada.
En rojo la ruta.

Saldremos del pueblo por alguno de los numerosos senderos que se dirigen a la base de las paredes. Bordeamos las mismas hacia el Oeste quedando impresionados por su verticalidad.
Pronto entramos en una vaguada entre los Mallos Fire y Pison.
El mapa anterior está sacado de la web de Iberpix (Instituto Cartográfico Nacional) y está errado en los nombres de los Mallos. Donde dice Mallo Pisón debe decir Fire y donde dice El Puro, debe decir Pisón.

El Mallo Fire el más occidental con vías de gran dificultad.

Según progresamos por el sendero que separa los dos Mallos, se nos abre el panorama con el río Gállego debajo.

La senda zigzaguea, a veces con pendiente, pero la orientación de esta comba nos permite ascender con días soleados en agradable sombra.

Panorámica de la zona. Al Sur se abren ya las planicies de Huesca que llevan hasta el Ebro.

La parte dura del recorrido es la ascensión hasta el Collado de los Mallos, pero con ritmo calmado (hoy la ruta es corta),  disfrutamos con la vista de la zona trasera de estas monumentales esculturas.

Muy abajo quedan los tejados del pueblo de Riglos.

La roca del entorno salpicada de las flores de primavera.  La foto no señala la ruta, pues en ningún caso nos supondrá atravesar pasos delicados.

Alcanzado el Collado de los Mallos (1.000 m.), sólo queda descender por la otra vertiente en sendero a ratos suave y a ratos más empinado.

Nuevas vistas del pueblo de Riglos.

Ahora contemplamos los Mallos desde la orientación Este. A la derecha del Mallo Pisón la emblemática Chimenea Pany Hause que me trae recuerdos de hace bastantes años.

 Más hacia el Este otros Mallos de menor altura pero también repletos de vías de escalada como el Colorado, la Aguja Roja, El Coré, El tornillo, etc.

La ruta va llegando a su fin. Al fondo los otros Mallos, los de Agüero.

Ya he comentado que en días festivos y con buen tiempo es fácil encontrar cordadas metidas en acción y con unos prismáticos se disfruta de algunas osadías.

La jornada la podemos terminar en el mismo pueblo, pero también es una buena opción retomar el vehículo y a escasos 8 Km. de Riglos acercarnos a disfrutar del Castillo de Loarre. Castillo románico de excelente conservación y donde se ha rodado alguna buena película.