Fecha: 17 de Noviembre de 2.018.
Ruta: Aparcamiento de la Selva de Oza junto al camping (1.120 m.)- Salida del bosque (1.650 m.)- Refugio de Castillo de Acher (1.730 m. )- Desvío a izquierda (2.039 m. )- Collado de entrada al Castillo ( 2.250 m.)- Cima del Castillo de Acher (2.384 m. ). Regreso por la misma ruta.
Accesos: Desde la localidad de Hecho, tomar la carretera que lleva a Siresa. Sin entrar en este pueblo continuar por la pista asfaltada camino de la Selva de Oza. En un momento atravesaremos el estrechamiento conocido como Boca del Infierno. Una nueva foz en la que la carretera se pega a la roca, nos llevará a las agradables praderas de la Selva de Oza. Aparcamos en los lugares habilitados.
Horarios: 00:00 h. Iniciamos la ruta desde el aparcamiento junto al camping.
01:20 h. Salimos del bosque.
01:40 h. Alcanzamos la zona del Refugio del Castillo de Acher. Queda a la derecha.
02:20 h. Desvío definitivo hacia el Castillo de Acher.
03:00 h. Alcanzamos el collado que da entrada al Castillo.
03:30 h. Cima del Castillo. Parada para comer algo y fotos.
04:10 h. Inicio del descenso por la misma ruta de subida.
07:00 h. Llegada al aparcamiento.
Desniveles: Acumulados 1.300 metros en ascenso y los mismos en descenso.
Dificultad: Media por el desnivel a salvar, aunque la ruta no ofrece otros problemas en ausencia de nieve.
Fotografía del Castillo de Acher desde el punto de inicio y final de la ruta. Foto de otro año, pues en esta salida las nubes nos impidieron disfrutar de esta preciosa vista desde Oza.
Ruta seguida en amarillo. Es la habitual para esta cima.
No es novedad la colaboración mutua entre clubes de montaña y en este día los clubes Azuandarines de Azuqueca de Henares y el Mayencos de Jaca habíamos quedado para ascender esta espectacular cima pirenaica. A las 07:00 h. el punto de contacto fue Jaca y a las 08:00 ya estábamos en el aparcamiento de Selva de Oza.
La foto protocolaria del inicio. Diez Azuandarines y diez Mayencos. Las nubes cubrían el cielo aunque las previsiones eran mejores.
Comenzamos la ruta buscando el conocido poste de señalización junto al puente de Oza.
Un panel nos da alguna información. En estos primeros metros seguiremos las marcas de la Gr 11.
Pasaremos bajo un complejo de tirolinas que en verano tienen bastante aceptación y un leve descenso nos llevará a un prado desde donde se inicia una subida continuada y en ocasiones dura hasta nuestra cima de hoy.
En este primer tramo todavía encontraremos alguna señalización que nos servirá de ayuda.
Después, el hayedo entremezclado con abetos será nuestro mundo. Las duras rampas de esta primera zona no nos deberá impedir el disfrute del color otoñal. Hoy con las hojas en el suelo el hayedo estaba especial.
A pesar de que la nubosidad seguía presente, el punteo del sol sobre la cresta de los Lenitos, me hacía pensar que se pudieran cumplir las previsiones de la meteo.
El grupo, numeroso, transitaba por tramos espectaculares.
En ocasiones las raíces de las hayas parecían tentáculos prestos a moverse. También hubo algún resbalón pues estas raíces mojadas y escondidas bajo la hojarasca son una pequeña trampa.
Tras casi una hora y media, salimos del bosque. Como conozco la ruta por haberla recorrido en varias ocasiones, saco esta inútil foto hacia lo que debería ser el murallón del Castillo. La nube sigue allí.
La salida del bosque coincide con un tramo especialmente duro. Hoy más pues estaba muy resbaladizo. Nos esperaría de regreso para las correspondientes culadas.
Si hacia nuestro Castillo la nube no se disolvía, cuando mirábamos hacia el Oeste, el macizo de Peña Forca lucía espectacular. No podía ser. ¿ Mala suerte en nuestra ruta?.
Tras la dura y resbaladiza rampa llegamos a un tramo herboso más agradable y que permitió reconfortar el esfuerzo con bonitas fotos para el archivo de cada uno.
En esta zona dejamos a nuestra derecha (Sur), el Refugio del Castillo que no es sino una cabaña precaria utilizada sólo por ganaderos. Seguimos la senda en busca de la nube. Hasta aquí llevamos un buen ritmo.
Seguimos la senda bastante clara moviéndonos por territorio rojizo. Nos movemos cerca de los 1.900 metros.
Y finalmente entramos en lo que no nos apetecía. La niebla que además enfriaba el ambiente. El grupo se estira y proceden diversas paradas para recuperar la unidad. Importante en estas condiciones de escasa visibilidad.
Y de repente se produce lo que todos esperábamos, que la nube desapareciera. Por fin aparecen a la vista las escondidas paredes o murallas del Castillo de Acher.
El tramo anterior nos llevaba dirección Este, pero a la atura de los 2.000 metros, la senda cambia radicalmente de sentido buscando la orientación Oeste.
Sin más dificultades atravesamos una preciosa faja roja mientras se intuye la "puerta" del Castillo.
Este tramo horizontal es especialmente bello.
Y fotogénico.
Después arranca una cantalera que aunque dispone de senderillo, se hace especialmente dura. Llevamos más de mil metros de desnivel en las piernas.
Este tramo se hace duro para alguno y nos lleva a ralentizar la marcha, pero el día está ya claro y vamos bien de tiempo.
La entrada al Castillo es espectacular, en especial para el que llega por primera vez. Un valle suspendido dentro de las murallas que quedan recortadas a modo de almenas.
Poco quedaba de las nevadas de hace 15 días, pero nuestra ladera con cierta orientación Norte, presentaba nieve bastante dura en la traza del sendero, así que optamos por salvar la eventualidad siguiendo la cresta. La cima del Castillo quedaba soleada al terminar la ladera herbosa de la foto.
Espectaculares fotos en la cresta.
La cima está a la izquierda de la foto.
Una panorámica hacia atrás con gran vista del entorno. Algunas fotos que me mandan los colegas de Azuandarines.
El día quedó precioso.
A la derecha dos picos con renombre. Una pena que aunque las nubes se disolvieron, siempre quedaban restos en algunas cumbres próximas.
Una diagonal en hierba nos llevará hasta la cima. Son pocos metros pero siempre se hace dura.
De fondo Peña Forca que desde aquí presenta una vista especial.
En la cima reunión y picoteo. Por supuesto fotos y más fotos. Como el grupo se había alargado en el tramo final, algunos ya estaban comiendo mientras llegaban los últimos, pero la mañana se mantenía suave y sin apenas viento lo que en estas cimas es gloria.
Cada cual sacó las fotos a su gusto, aunque por las que he recibido, los gustos eran muy semejantes.
En primer plano el sinclinal del Castillo de Acher y de fondo Peña Forca.
Buzón de cima.
Otros.
Tocaba retirarse y nada mejor que una foto de grupo.
Iniciamos el descenso por donde habíamos venido.
Una manada de sarrios dentro del Castillo, ni se inmutan ante nuestra presencia.
Apuramos las fotos.
Buscando detalles.
Descenso de la canaleta que da acceso al Castillo y que sin nieve no ofrece dificultades.
A partir de aquí disfrutar del día, del entorno y de las nuevas luces que cambian nuestros paisajes.
Petrechema y las Agujas de Ansabère.
Llegamos a Oza con sol de tarde y con visión del Pico Chipeta Alto que domina también este entorno y que de mañana no habíamos podido contemplar.
Aunque el descenso se hace duro, la llegada al aparcamiento es verdaderamente reconfortante con un entorno especial.
El día ha sido magnífico y lo terminamos en Jaca con una tertulia y algunas cervezas.
El día siguiente se completó con una ruta por el entorno de los Mallos de Riglos.
Un abrazo a los amigos de Azuandarines en la persona de su presi Luis.
Nos hizo un dia estupendo contra todo pronóstico, la ruta espectacular y el valle colgado majestuoso.... Lo mejor, la compañia
ResponderEliminarTodos disfrutamos.
ResponderEliminarGran compañía.
Un abrazo.